Los conquistadores españoles fueron unos monstruos ávidos de sangre y riqueza que cometieron un terrible genocidio en América Latina y la saquearon sin piedad.
Esa es la visión más extendida de la conquista de América, la más aceptada.
Pero en su nuevo libro, «Conquistadores: una historia diferente» -publicado en español por la editorial Turner Noema-, el historiador mexicano Fernando Cervantes, se atreve a contestarla.
A lo largo de 534 páginas (casi un centenar de las cuales corresponden a notas y bibliografía) y basándose en fuentes primarias como diarios, cartas, crónicas, biografías, encomios y tratados elaborados tanto por los conquistadores y sus defensores como por sus críticos y en muchos casos poco conocidos, Cervantes hace una relectura de la conquista de América que va claramente a contracorriente.
«Nuestra percepción de los conquistadores ha acabado enredada en un mito extrañamente pertinaz, que ve en la historia de España poco más que la crónica de una crueldad al servicio de la reacción política y el fanatismo religioso», señala en la introducción del libro.